A menudo, cuando reflexionamos sobre una vida saludable, esta inmediatamente se asocia a una dieta equilibrada, a ejercicio regular y a la ausencia de estrés. Sin embargo, hay un componente esencial que suele pasarse por alto en esta ecuación: el sueño. ¿Cuántas veces hemos sacrificado horas de descanso por motivos laborales o personales? ¿Cuán a menudo un problema o dificultad afecta a la calidad y cantidad de nuestro descanso?
A pesar de ser un pilar fundamental de nuestro bienestar, a menudo se relega a un segundo plano en nuestras prioridades diarias. Pero ¿qué pasaría si afirmamos que la calidad del sueño tiene un impacto directo en la salud física, mental y, consecuentemente, en el desempeño profesional? Esta fue la principal premisa que el Dr. Antoni Esteve, fundador de AdSalutem Instituto del Sueño, desarrolló durante el Encuentro AED que celebramos en Barcelona bajo el título de “El impacto del sueño (y la falta de) en el desempeño profesional”.
El estado emocional y mental de los directivos es crucial para enfrentar los desafíos empresariales actuales. Para ello, el experto puso como ejemplo un estudio de McKinsey en el que se constata que un descanso adecuado influye en la capacidad de resolver problemas, tomar decisiones y fomentar un clima laboral saludable. Concretamente, resaltó que se ha demostrado que el buen ánimo del líder puede contagiar un clima positivo en su entorno, mientras que la privación de sueño puede llevar al agotamiento y al desgaste, afectando el rendimiento y la motivación del equipo.
Además, el sueño juega un papel determinante en las competencias clave de liderazgo, como la concentración y la creatividad. Por lo tanto, un descanso adecuado se vuelve esencial en la gestión empresarial para promover un entorno laboral saludable y mejorar el rendimiento del equipo.
Sensación de fatiga y somnolencia diurna, las dos señales de alerta
Durante la sesión, también se señaló las dos señales clave que podrían indicar si estamos experimentando un buen descanso o no: la sensación de fatiga persistente y la somnolencia diurna. Estos síntomas pueden ser indicativos de problemas subyacentes en la calidad del sueño, como trastornos del sueño no diagnosticados o malos hábitos de sueño.
Priorizar el sueño no solo tiene beneficios a corto plazo en términos de bienestar y rendimiento laboral, sino que también puede tener importantes beneficios a largo plazo. Las personas que mantienen hábitos de sueño saludables tienen un menor riesgo de desarrollar enfermedades. Concretamente, el experto subrayó que las consecuencias de la privación de sueño van desde el debilitamiento del sistema inmune hasta un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, neurodegenerativas, y de salud mental, como la depresión.
Hábitos horarios: no a las cenas tardías entre semana y sí a la siesta
Además de adoptar hábitos saludables, como una dieta equilibrada y la práctica de ejercicio físico, existen recursos médicos y terapéuticos para abordar los problemas de sueño. La consulta con especialistas en medicina del sueño y la adopción de una buena higiene del sueño, que incluya la creación de un ambiente propicio para el descanso, son fundamentales para mejorar la calidad del sueño y prevenir trastornos asociados.
El Dr. Esteve también aportó algunas recomendaciones, como evitar las cenas tardías entre semana, ya que alteran los horarios y perjudican las horas de descanso; y defendió la siesta, apuntando que un descanso después de comer de un máximo de 20 minutos es muy saludable para desconectar: “Es un reset para nuestro organismo que ayuda a ser más productivo por la tarde”, destacó.
El horario español, un hándicap para el buen descanso de los ciudadanos
El Dr. Esteve señaló un problema estructural en el país relacionado con los horarios laborales, destacando que España tiene un “prime time” tardío y que muchos trabajadores finalizan su jornada laboral muy tarde. Esta cultura laboral puede tener un impacto significativo en la calidad del sueño de la población, ya que reduce el tiempo disponible para descansar adecuadamente durante la noche. “Trabajamos tanto o más que el resto de los europeos, pero nuestro nivel de productividad es de los más bajos”, apuntó.
A pesar de esta situación, el fundador de AdSalutem se mostró optimista sobre la posibilidad de que se implementen políticas que promuevan horarios más saludables en el futuro: “Tarde o temprano se van a aplicar políticas para establecer mejores horarios, estamos predestinados”, argumentó. Asimismo, sugirió que España debería considerar ajustar su huso horario al de Portugal y Reino Unido.
Estrategias para promover el sueño saludable en la empresa
Para promover el sueño saludable entre los empleados y mejorar su bienestar general, las organizaciones pueden implementar diversas estrategias. Esto incluye desde sensibilizar sobre la importancia del sueño y fomentar una cultura que valore el descanso adecuado, hasta el impulso de programas de bienestar que incluyan actividades relacionadas con el descanso saludable: sesiones de relajación, ejercicios de respiración o talleres sobre higiene del sueño. También es importante crear entornos laborales que faciliten el descanso, como proporcionar áreas de descanso adecuadas o permitir horarios flexibles que se ajusten al ritmo circadiano de los empleados.
AdSalutem tiene un programa de sensibilización (“Mantén tu empresa despierta”) sobre la importancia del sueño por la salud cerebral y bienestar de los profesionales. En caso de que fuera de tu interés, puedes escribirnos a aed@asociaciondedirectivos.org y te pondríamos en contacto con el Dr. Esteve y su equipo.
Próximamente en Madrid
El 11 de junio por la tarde celebraremos en la Fundación Pons de Madrid una sesión con el Dr. Esteve en la que profundizaremos en el impacto del sueño en el desempeño profesionales de los directivos y las empresas. Recibirás en breve la convocatoria para poder inscribirte.
