El pasado 16 de marzo, el Congreso de los Diputados aprobó un Real Decreto Ley con el objetivo de ampliar los derechos de los pensionistas, reducir la brecha de género y establecer un nuevo marco de sostenibilidad. Pero, ¿qué implica para las empresas y los directivos esta medida? Lo hemos analizado esta mañana en una sesión online en la que han participado Ángel de la Fuente, director de FEDEA, y María Eugenia Guzmán, socia de Laboral de PwC, y que ha sido presentada por Albert Collado, socio de Garrigues y miembro de la Junta Directiva de AED.
Las claves de la reforma
María Eugenia Guzmán, socia de Laboral de PwC, considera que la reforma “tiene una tendencia de generar ingresos para el Estado, no tanto de mejorar la situación de los pensionistas”. Y añade que “estamos en un sistema que necesita reforzarse, porque muchos de los baby boomers vamos a ir jubilándonos en los próximos años y esto va a generar una situación muy dura para el sistema” y, por lo tanto, “la reforma de las pensiones debería poder paliarlo”.Entre las medidas esenciales de esta normativa, Guzmán destaca:
- El “aumento progresivo de las bases máximas de cotización”.
- El “establecimiento, por primera vez, de una cuota de solidaridad para que la masa salarial quede por encima de la base máxima y, por tanto, exenta de cotización, contribuya a la sostenibilidad del sistema”.
- La “cotización finalista del mecanismo de equidad intergeneracional, consistente en una cotización del 1,2% (1% para la empresa y 0,2% para el trabajador), aplicable en todos los supuestos en los que se cotice por la contingencia de jubilación que no será computable a efectos de prestaciones y que nutrirá el Fondo de Reserva de la Seguridad Social”.
Hacia un modelo sostenible
Por su parte, Ángel de la Fuente, director de FEDEA, señala que “el real decreto forma parte de una necesidad más amplia, garantizar la sostenibilidad”, un hecho que, según él, no se está consiguiendo. Para lograrlo, propone que “a largo plazo, la mejor solución sería ir hacia un sistema tipo sueco de cuentas nacionales con una rentabilidad nacional ligada al crecimiento del PIB. Un sistema que esta diseñado para ser sostenible, que paga las pensiones que puede pagar en función de la situación económica del país”.En España, asegura De la Fuente, “debemos evitar que se dispare el déficit y eso exige varias cosas”:
- Elevar la edad de jubilación en las situaciones que se pueda.
- Aumentar el periodo de cómputo hasta toda la vida completa.
- Inyectar ingresos de forma equitativa y transparente.
