Novartis recibió ayer uno de los Premios Conética a la responsabilidad Social Corporativa (RSC) en la categoría Gran Empresa, unos premios que celebran su tercera edición y que reconocen las políticas de empresas que mantienen el equilibrio entre las tres vertientes de la responsabilidad social: la económica, la emocional interna y la ética con la sociedad y el medio ambiente.
El director de Comunicación Corporativa y Relaciones Institucionales de Novartis, Fernando Mugarza, fue el encargado de recoger el premio de manos del regidor del Ayuntamiento de Barcelona Xavier Trías, en un acto celebrado en la Ciudad Condal presentado por el periodista de Canal Cuatro Jon Sistiaga.
Los premios Conética reconocen el mérito de las empresas que no sólo se preocupan por la obtención de beneficios económicos, sino también por la mejora de la sociedad, es decir, por aspectos como el desarrollo y aumento de la calidad de vida de los trabajadores, la integración y la ayuda a los colectivos más desfavorecidos, la preservación del medio ambiente y el fomento de una política económica responsable, transparente y generadora de empleo de calidad.
Según la directora general de Conética, Silvia Urarte, lo más destacable de Novartis es, sin duda, el equipo humano. Se nota que se lo creen, explica la principal responsable de esta organización especializada en RSC que nació con la vocación de ayudar a las organizaciones a ser socialmente responsables.
Son varias las acciones de RSC llevadas a cabo por Novartis que ha valorado el jurado de los Premios Conética, integrado por reconocidos profesionales de diferentes ámbitos, todos ellos comprometidos con la sociedad y que incluye a profesores universitarios, periodistas, políticos y consultores.
En primer lugar, Novartis ha adquirido un compromiso con la transparencia, por lo que publica anualmente un Informe de Gobierno Corporativo y una Memoria de Sostenibilidad, según los criterios de la Global Reporting Initiative (GRI).
Pero además, Novartis destaca en su responsabilidad con los empleados. De hecho, ha creado un proyecto especifico con el que ofrece diversas ventajas para que se puedan conciliar vida personal y laboral, el Proyecto Trébol, que establece la posibilidad de trabajar desde casa, limita el horario de reuniones, ofrece flexibilidad horaria y ampliación opcional de los permisos de maternidad y paternidad. Se ha valorado todo lo que hace tanto a nivel
interno como externo, apunta Silvia Urarte. Otras acciones en este campo son la Semana de la Prevención y la Campaña Segurín, dos medidas que ponen de manifiesto que la prevención de riesgos laborales y la seguridad en el trabajo es una prioridad para la compañía.
En materia de acción social la empresa colabora con diversas ONGs y Fundaciones en multitud de iniciativas que van encaminadas, mayoritariamente a mejorar la salud y las condiciones de vida de las personas.
Los empleados de Novartis, además, participan en iniciativas como el Día de la Solidaridad, en la repartición de juguetes a niños de centros de acogida, en campañas anuales de recogida de ropa de segunda mano o en 1 euro solidario, una iniciativa por la que el personal aporta esa cantidad de cada una de sus nóminas, igualando la Compañía esta aportación, para proyectos humanitarios.
Impacta mucho cómo Novartis atiende a las diferentes peticiones; como mínimo, siempre te escuchan. Además, todos sus proyectos tienen una vertiente emocional y ética, subraya la directora general de Conética.
Acerca de Novartis
El deseo de ser reconocidos en la sociedad como una Compañía responsable yace en el centro del concepto de Civismo Empresarial de Novartis y se trata de comportarse del mismo modo que lo haría un ciudadano adulto, responsable y sensato. Es por ello que Novartis ha decidido fijarse unos rigurosos y estrictos niveles éticos en el desarrollo de sus actividades. A mediados de 1999 estableció un Código de Conducta para todo el Grupo a
nivel mundial. En el año 2000, Novartis se adhirió al Pacto Mundial (The Global Compact), una iniciativa impulsada por el Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi Annan. En el año 2001, éstas y otras iniciativas culminaron en la Política de Civismo Empresarial de Novartis.
En el año 2002, Novartis Farmacéutica pasó a ser la primera empresa multinacional certificada en Gestión Ética, según la Norma de Empresa SGE21 Forética, recientemente renovada. Esta certificación es sólo un ejemplo más del firme compromiso de Novartis hacia una gestión socialmente responsable y demostrada tanto a nivel internacional como nacional, a través de otras muchas iniciativas entre las que destacan: la Fundación Novartis para el Desarrollo Sostenible; el Instituto Novartis para Enfermedades Tropicales; la lucha contra la Lepra y la Malaria en colaboración con la OMS; apadrinamiento de niños en la India; participación en la Caravana Solidaria a África Occidental, colaboraciones con ONG’s locales y solidaridad con catástrofes ecológicas.
Novartis es líder en programas de acceso a fármacos. Los programas, destinados a combatir la lepra, la malaria, la tuberculosis o el cáncer, valorados en 696 millones de dólares, llegaron a 6,5 millones de pacientes en 2005. Novartis destina un 2,2% de su cifra de ventas a la ayuda al desarrollo mediante estos programas de acceso.
Estos principios y actuaciones, hacen que el Grupo Novartis en España sea una Organización con vocación de ciudadano responsable, a la vez que generador de bienestar, mediante las actividades que le son propias dentro de su ámbito de actuación, el cuidado de la salud.
Recientemente, Novartis se ha posicionado como empresa farmacéutica líder en los índices europeo y mundial del Dow Jones Sustainability Index (DJSI). Novartis, que ha alcanzado unas puntuaciones globales superiores al 80%, es una de las compañías de referencia en sostenibilidad en el sector farmacéutico. El proceso de selección ha ido precedido de una completa evaluación del rendimiento económico, ambiental y social de la empresa, para incluirla en índices que realizan un seguimiento de las compañías que cumplen las normas de responsabilidad empresarial mundialmente reconocidas.